Medicamentos para la tos con expectoración en niños
La tos con expectoración es una respuesta natural del cuerpo para expulsar la mucosidad del sistema respiratorio. Es importante no suprimirla con medicamentos inhibidores, sino utilizar aquellos que hagan que la flema sea más fluida y fácil de eliminar. Aquí presentamos diferentes opciones de medicamentos expectorantes para tratar la tos en niños de manera efectiva.
Ambroxol: tornando la flema más líquida
El Ambroxol ayuda a tornar la flema menos gruesa, facilitando su eliminación. Puede encontrarse en forma de jarabe pediátrico de 15 mg/5 ml o en solución oral de 7,5 mg/ml para niños mayores de 2 años. Es importante destacar que este medicamento no es recomendado para niños menores de 2 años.
La dosis de Ambroxol pediátrico depende de la edad o peso del niño y de la presentación farmacéutica que se pretenda usar. Es fundamental consultar al pediatra para determinar la dosificación adecuada para cada caso.
Entre los posibles efectos secundarios del Ambroxol se encuentran alteraciones del gusto, náuseas, vómitos, diarrea, acidez o indigestión.
Acetilcisteína: aliviando la tos
La acetilcisteína ayuda a aliviar la tos al tornar la flema más líquida y facilitar su eliminación. Se encuentra disponible en forma de jarabe pediátrico de 20 mg/ml.
La dosis recomendada de acetilcisteína varía según la edad del niño. Para niños de 2 a 4 años, se recomienda una dosis de 5 ml, de 2 a 3 veces al día. Para niños mayores de 4 años, la dosis recomendada es de 5 ml, de 3 a 4 veces al día. El tiempo de tratamiento debe ser indicado por el pediatra.
Entre los efectos secundarios más comunes de la acetilcisteína se encuentran trastornos gastrointestinales como náuseas, vómitos o diarrea.
Bromhexina: disolviendo la flema
La bromhexina ayuda a disolver la flema para facilitar su eliminación. Se encuentra disponible en forma de gotas o en jarabe infantil de 4 mg/ml.
La dosis de bromhexina para niños depende de la edad o peso y de la forma farmacéutica utilizada. Es fundamental seguir las indicaciones del pediatra para determinar la dosificación adecuada.
Entre los posibles efectos secundarios de la bromhexina se encuentran náuseas, vómitos o diarrea.
Carboximetilcisteína: facilitando la eliminación de mucosidad
La carboximetilcisteína es un medicamento expectorante que facilita la eliminación de flema. Se encuentra disponible en forma de jarabe infantil de 20 mg/ml.
La dosis recomendada de carboximetilcisteína para niños entre 2 y 12 años es de 0,25 ml por kg de peso corporal, 3 veces al día. Es fundamental consultar al pediatra para determinar la dosificación adecuada.
Entre los efectos secundarios más comunes de la carboximetilcisteína se encuentran trastornos gastrointestinales como náuseas, diarrea y malestar abdominal.
Guaifenesina: tornando la flema menos gruesa
La guaifenesina es un expectorante que actúa tornando la flema menos gruesa y facilitando su eliminación. Se encuentra disponible en forma de jarabe infantil de 100 mg/15 ml.
La dosis de guaifenesina varía según la edad o peso del niño. Es importante seguir las indicaciones del pediatra para determinar la dosificación adecuada.
Entre los posibles efectos secundarios de la guaifenesina se encuentran trastornos gastrointestinales como náuseas, diarrea, malestar abdominal, somnolencia o dolor de cabeza.
Acebrofilina: eliminando la flema de forma más fácil
La acebrofilina es un medicamento que ayuda a eliminar la flema de forma más fácil. Se encuentra disponible en jarabe pediátrico de 5 mg/ml.
El jarabe de acebrofilina está indicado en niños a partir de los 2 años de edad. La dosis recomendada varía según la edad del niño y debe ser indicada por el pediatra.
Es importante destacar que, antes de administrar cualquier medicamento a un niño, se debe acudir al pediatra para recibir la prescripción adecuada y determinar la causa de la tos.
Recuerde siempre seguir las indicaciones del médico y no exceder las dosis recomendadas.