Desorden olfativo: Cuando los olores se convierten en una pesadilla
La parosmia es un trastorno del sentido del olfato que provoca dificultad para identificar y percibir los olores, transformando aquellos que solían ser normales y agradables en desagradables e insoportables.
Este desorden no solo afecta al sentido del olfato, sino también al sentido del gusto. En algunos casos, las personas que sufren de parosmia pueden experimentar aversión hacia alimentos que antes disfrutaban.
El origen de la parosmia
La parosmia es causada por daños en los nervios olfatorios, los cuales envían señales al cerebro para identificar los olores. Estos daños suelen ser el resultado de infecciones bacterianas o virales del tracto respiratorio, como la sinusitis, el resfriado común o incluso el COVID-19.
La parosmia puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de una persona. Las alteraciones en la percepción de los olores pueden desencadenar cambios en el estado de ánimo, ansiedad e incluso depresión.
Principales síntomas de la parosmia
Los síntomas más comunes de la parosmia incluyen:
- Dificultad para reconocer o percibir olores y aromas: los olores que solían ser normales y agradables ahora son percibidos como desagradables o insoportables, como el olor de los alimentos o los perfumes.
- Dificultad para alimentarse o sensación de náuseas al comer: debido a la estrecha relación entre el olfato y el gusto, la parosmia puede afectar negativamente el apetito y provocar pérdida de peso.
Es importante destacar que la parosmia puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de una persona. Los cambios en la percepción de los olores pueden dar lugar a alteraciones en el estado de ánimo, ansiedad o depresión.
Diagnóstico de la parosmia
El diagnóstico de la parosmia se realiza a través de una evaluación realizada por un otorrinolaringólogo o médico general. Se tienen en cuenta los síntomas, los antecedentes de infecciones recientes, los hábitos de vida (como el tabaquismo o el uso de medicamentos) y los antecedentes de enfermedades neurológicas o cáncer.
Si bien no existe un examen específico para diagnosticar la parosmia, el médico puede realizar pruebas de olfato en las que se presentan distintas sustancias al paciente para que pueda identificar y describir los olores.
En algunos casos, el médico puede solicitar estudios adicionales, como una tomografía computarizada, una resonancia magnética o incluso una biopsia nasal, para identificar las posibles causas subyacentes de la parosmia.
Posibles causas de la parosmia
La parosmia puede ser causada por diferentes factores, entre ellos:
- Resfriado común
- Sinusitis
- COVID-19
- Exposición al humo
- Tabaquismo
- Enfermedad de Parkinson
- Alzheimer
- Traumatismo cerebral
- Enfermedad de Huntington
- Tumor cerebral o en los nervios olfatorios
- Tratamientos de quimioterapia o radioterapia para el cáncer
Si experimentas cambios en tu sentido del olfato, es importante que consultes a un otorrinolaringólogo o médico general para que puedan diagnosticar la causa subyacente y brindar el tratamiento adecuado.
El COVID-19 y la parosmia
Algunos estudios han demostrado que el COVID-19 puede causar parosmia en algunas personas que se están recuperando de la pérdida del olfato causada por el virus. El daño a los nervios olfatorios provocado por el coronavirus puede dar lugar a la parosmia.
Aunque es poco frecuente, la parosmia puede desarrollarse aproximadamente de 1 a 2 meses después de la infección inicial por el COVID-19 y persistir durante 8 meses o más. Esto puede generar la sensación de olores alterados, como los de alimentos en mal estado o carnes podridas, lo cual puede afectar significativamente la calidad de vida de la persona.
Tratamiento de la parosmia
El tratamiento de la parosmia varía según la causa subyacente. En casos en los que la parosmia está relacionada con factores como el tabaquismo, el uso de ciertos medicamentos o el tratamiento del cáncer, suspender estos factores o medicamentos puede permitir que el sentido del olfato vuelva a la normalidad sin necesidad de un tratamiento específico. Sin embargo, es importante consultar con un médico antes de suspender cualquier tratamiento médico.
Cuando la parosmia persiste, el médico puede recomendar el uso de ciertos medicamentos, como el clonazepam, la fenitoína, el topiramato o el ácido valproico, para ayudar a aliviar los síntomas.
En el caso de la parosmia causada por el COVID-19, por lo general mejora con el tiempo sin necesidad de un tratamiento específico. Sin embargo, es posible realizar un entrenamiento del olfato para acelerar la recuperación. Este entrenamiento implica inhalar diferentes aromas, como los aceites esenciales de limón, rosa, clavo de olor y eucalipto, durante al menos 20 segundos al menos dos veces al día durante al menos 3 meses. Aunque este entrenamiento puede ayudar en la recuperación del sentido del olfato, se requieren más estudios científicos para demostrar su eficacia.
En resumen, la parosmia es un trastorno del sentido del olfato que puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de una persona. Si experimentas cambios en tu sentido del olfato, es importante que consultes a un médico para que puedas recibir un diagnóstico adecuado y un tratamiento adecuado.
Si deseas obtener más información sobre este tema o tienes alguna consulta, no dudes en contactarnos. Estaremos encantados de ayudarte.
Fecha de publicación: Octubre de 2023
Autor: Dr. Gonzalo Ramírez – Psicólogo y Médico General
Revisado por: Andreina De Almeida Rodríguez – Nutricionista-Dietista en octubre de 2023