Cada proyecto tiene objetivos específicos y establecerlos correctamente, es clave para desarrollar una estrategia. Dichas metas, también se conocen como KPIs, es decir, indicadores clave del rendimiento de una empresa. En el ámbito de la logística, éstos pueden variar, pero muchos otros son similares dadas las etapas del proceso. Por ello, en este artículo exploraremos algunos ejemplos de KPIs de logística.
¿Qué son los KPIs y por qué son importantes?
Los Key Performance Indicators, indicadores clave de desempeño o rendimiento, son métricas que se utilizan para medir y evaluar la productividad de una organización o área de acuerdo a los objetivos establecidos.
Su importancia radica en que permiten medir de manera cuantitativa el progreso de las metas, así cómo determinar la eficiencia, calidad, cumplimiento y áreas de oportunidad de las actividades desempeñadas.
Los KPIs varían según la industria, departamento, actividad e, incluso, la temporalidad. En el caso de la logística, se pueden considerar diferentes tipos de objetivos ya que considera toda la cadena de suministro que va desde la producción, hasta la entrega de la mercancía.
Ejemplos de KPIs de logística
Como mencionamos anteriormente, los objetivos en esta industria pueden considerar diferentes áreas y categorías, de ahí la importancia de establecer objetivos claros con métricas medibles y acorde a las capacidades y recursos del personal y la compañía. Además de considerar las nuevas tecnologías en la logística que pueden beneficiar el rendimiento de la empresa.
Sin embargo, hay indicadores que se pueden aplicar de manera general o, incluso, como base para medir el rendimiento. Algunos ejemplos de KPIs de logística que se pueden tomar en cuenta son:
- Manejo de inventarios: Para este caso, se debe considerar la rotación del mismo, es decir, con qué frecuencia se venden, compran o utilizan los productos. Si un inventario tiene una rotación alta o con mayor frecuencia, significa que la mercancía genera interés y buenos ingresos para la empresa. El KPI en este caso se mide como un incremento de la rotación de inventario, por ejemplo, un 50%, quiere decir que se duplicó.
- Precisión de pedidos: El éxito de una empresa depende de la satisfacción del cliente final, por lo que llevar un control de los pedidos es indispensable para garantizar un buen servicio. Esto implica tiempos de entrega, eficiencia del transporte y cumplimiento. La manera de medir el rendimiento en este caso es el incremento de pedidos completados, el promedio de entrega o encuestas de satisfacción.
- Índice de devoluciones: Este KPI es un ejemplo de lo que se buscaría disminuir en las metas, ya que implica pérdidas de dinero, tiempo, producción y clientes. Las altas tasas de devolución pueden indicar problemas de calidad o de cumplimiento, por lo que si hay menor porcentaje de devoluciones en comparación con meses anteriores, quiere decir que hay un mejor rendimiento, en el caso contrario, indica que hay alguna falla en la cadena de suministro y se debe detectar para mejorar el servicio.
- Precisión de Pronósticos: Una de las claves de la logística es prevenir riesgos en la cadena de suministros, por ejemplo, retrasos de producción, alteraciones climáticas, exceso de inventario, etcétera. Así, evaluar la precisión de dichos factores implica un correcto análisis de la estrategia, recursos y capacidades, lo que a su vez se mediría en haber atendido una crisis en poco tiempo o haber reaccionado a ello de manera adecuada.
- Cumplimiento de normas: Es importante que las empresas actúen conforme a las regulaciones establecidas sobre seguridad, transporte, salubridad, etcétera. Para medir ello, se toma en cuenta el porcentaje del cumplimiento o seguimiento de las normas, por ejemplo, la cantidad de inspecciones que fueron aprobadas en su totalidad o parcialmente, así como aquellas que no fueron acreditadas.
- Accidentes laborales: Un ambiente laboral seguro y sano para los empleados es clave y en las áreas de fábrica o transporte, pueden ocurrir accidentes. Disminuir la tasa debe ser prioridad para las compañías y eso se puede evaluar con comparativas de un mes a otro, evaluar la cantidad de colaboradores asegurados o el incremento en políticas para prevenir riesgos.
Es importante destacar que los anteriores son solo algunos ejemplos de KPIs de logística, sin embargo, la selección de los mismos depende de los objetivos y las necesidades específicas de cada empresa. De igual manera, éstos ayudan a identificar áreas de oportunidad para mejorar el rendimiento que, a su vez, se puede ver apoyado por la integración de recursos tecnológicos que optimizan las tareas.