Las casas (sobre todo en las grandes ciudades) cada vez más reducen los espacios en general. De este recorte de metros cuadrados no se salvan los jardines, patios o terrazas. No obstante, para estos casos el concepto minimalista va de lo mejor porque crea una gran estética con pocos elementos y da sensación de amplitud.
Ahora bien, se dice fácil pero no lo es. Solo si se tienen conocimientos de paisajismo jardines es posible crear un verdadero oasis verde para pasar el tiempo al aire libre en el hogar. Se puede recurrir a empresas especializadas que sacan el mejor provecho al espacio y al presupuesto disponible y también se pueden seguir estos consejos:
1.-Establecer el concepto
Pasar tiempo con los seres queridos como amigos y familiares es uno de los usos más populares y agradables de un jardín. Se trata de un noble objetivo que proporciona grandes satisfacciones a quienes deciden utilizar espacios al aire libre para una fiesta o barbacoa e incluso, veladas veraniegas.
Para esto, un jardín como éste es una alternativa fantástica porque no sólo tiene espacio suficiente para que todos lo disfruten juntos, sino que además, tiene una estética sin igual con el césped, bancos y senderos de piedra o madera.
Ahora bien, ¿se busca realmente el concepto minimalista? De acuerdo con las líneas del diseño de paisajismo jardines, los minimalistas responden a una simplicidad de elementos con líneas limpias y una paleta de colores que no suele involucrar más de dos tonos y sus diversos matices.
Por lo general, un jardín minimalista se centra en plano de planta abierta mayormente conformado por césped, mucha luz natural, muebles funcionales de madera o su imitación y caminos de listones de madera o PVC similar a esta y cercado de plantas o arbustos en los límites. Si lo que se busca es muchas macetas, una gran variedad de plantas y/o flores escapa al concepto minimalista.
2.- Armonía en toda la extensión
Dentro de la noción de paisajismo de jardines, el minimalista es bastante singular, ya que a pesar de ser inconfundible y obviamente sencillo, no deja de tener elementos extravagantes.
No es de extrañar que se usen diseños muy simétricos o en extremo asimétricos y que, a la vez, sean modernos o vanguardistas.
Es común que adopten la forma de pequeñas colinas cubiertas de hierba que serpentean alrededor de la fachada de la casa o en el centro del mismo con guijarros, piedras de colores (por lo general naturales o blancas), un jardín zen de arena o elementos vintage como lámparas ruedas de carretas o similares que añaden un toque sencillamente maravilloso al entorno.
3.-Un solo elemento que destaque
Como se verá, un jardín minimalista no siempre tiene que estar reñido con la sencillez, sino que puede tener un toque de espectacularidad.
En esta idea de paisajismo de jardines suele haber un elemento que destaque por encima de los demás. Obviamente esto va a depender del diseño en general y de las dimensiones del espacio.
Una cama balinesa, tumbonas a juego con una pérgola de fibras naturales, hamacas, cerramientos acristalados o esculturas metálicas, de madera o acrílicos son ejemplos de adornos que representan el punto focal.
Para los más ecológicos puede ser un árbol que acapara el centro de las miradas y si es floral o frutal mucho mejor.
4.- Iluminación natural y artificial
Un jardín minimalista debe tener la dosis justa de sofisticación de objetos como muebles o caminos de piedras, pero también tiene que cumplir con la naturalidad de estos espacios.
Por tal tiene que contar con espacios techados con sobriedad y simpleza, pero con la mayor cantidad de luz natural. Aunque una imagen encantadora ideal la dará aquel jardín que se pueda aprovechar en las noches con una luz natural que no enceguece, pero que haga el espacio funcional.
5.- No perder el foco: es un jardín
Por más que se integre la construcción de cerramientos, pérgolas, suelos de piedra o madera y muebles se trata de un jardín. No pueden faltar el césped y las plantas. Si bien es un espacio que debe ser aprovechable al 100% no es una estancia más de la casa. Esto no debe dejarse nunca a un lado.