El dormitorio puede ser para algunos la zona más importante de su casa, y donde pasan la mayor parte del tiempo. En cambio, para otros es una estancia de mero paso, ya que debido al ajetreo de vida que llevan casi no les da más que para dormir.
En ambos casos siempre se acaba pasando unas cuantas horas en él y, por tanto, se merece los mismos cuidados, en cuanto a mobiliario y decoración, que la sala de estar o la cocina.
Esas horas suelen ser las necesarias para tener un descanso reparador, y para esto se necesita un ambiente propicio y sin estridencias. Una tendencia decorativa que lo logra es combinar de manera armoniosa los elementos habituales con cuadros relajantes, como los del catálogo de la galería de arte albertozaldivar.com.
¿Cómo elegir cuadros para el dormitorio?
En esta elección intervienen muchos factores y, por tanto, no debe ser algo para hacer con prisas ni en cualquier tienda. Desde los diferentes gustos de las personas que lo vayan a ocupar, la luminosidad de la estancia, y conseguir que no resulte “un extraño” entre los demás enseres; su elección es una decisión que hay que meditar antes de colocar en la pared un objeto que impida estar a gusto en la propia habitación.
Si se tiene en cuenta que el espacio que se desea decorar ya tiene su propio estilo y la diversidad de formatos disponibles que se pueden encontrar, el consejo de un profesional nunca está de más a la hora de adquirir obras que nos hagan sentir el dormitorio como un refugio alejado del estrés.
Para un espacio grande como puede ser la zona de detrás de la cama hay que sopesar que casi con toda probabilidad va a ser lo primero que veamos al entrar. Por ello, los cuadros que evocan la tranquilidad de la playa, los paisajes campestres o la belleza de una puesta de sol, bien sean en un único lienzo o en una composición de varios; van a resultar mucho más plácidos de contemplar que si se ponen otros más indicados para potenciar la energía.
Estos últimos pueden resultar una gran idea para contemplarlos nada más levantarse y que ayuden a comenzar el día con la fuerza que transmiten. Entre estos deberían primar aquellos cuyos colores sean alegres y colocarlos de manera que la iluminación no los ensombrezca.
Además, entre los diferentes estilos hay que apostar por aquellos que no cansen, que sean atemporales y ayuden a relajar la mente antes de dormir, o al levantarse, ya que el buen estado de ánimo es imprescindible para ambas cosas.
Cualquier obra pictórica, ya sea de una colección exclusiva o una sencilla lámina enmarcada, puede dar un giro sorprendente no solo a la habitación donde se coloque, sino también al final de un día agotador y al comienzo de uno nuevo.
Ante la proliferación de venta de obras que se pueden encontrar hoy en día, es importante que se adquieran aquellas que de verdad pertenezcan al autor. Esto es sencillo de verificar si se cuenta con la evidencia de que el vendedor cuente con el certificado de autenticidad firmado y numerado por el artista, como ocurre en las ediciones limitadas de la web de la galería de arte Alberto Zaldívar.
