Una buena parte de los gastos de una tienda online se debe a los envíos, que cada vez son más caros debido al alza de los combustibles, un coste que muchas de las agencias suelen repercutir en sus clientes.
Por eso, si queremos obtener más ingresos, siempre debemos buscar cómo pagar menos por los envíos, algo que nos permitirá vender más pudiendo ofrecer a los clientes precios más bajos.
Emplear un comparador
En la red podemos encontrar páginas como SHIP-QUIK – Comparador de envios, la cual hace una comparativa entre las principales agencias de transporte cada vez que vamos a mandar un pedido al cliente.
De esta manera, dependiendo de la zona, el día, el tipo de mercancía, peso, etc., nos ofrece la agencia que nos va a cobrar menos, por lo tanto, es la que debemos escoger con el fin de ahorrar en ese envío.
El ahorro lo podemos multiplicar por todos los pedidos que preparamos e incluso es posible incorporar el comparador a la web, de manera que el proceso sea automático sin que tengamos que intervenir.
Hay que darle al cliente varias opciones
Parece que todas las compras online tienen que llegar a la puerta de las casas con un mensajero, pero esa no es la forma más barata ni la más conveniente en muchas ocasiones, por lo que siempre hay que procurar que el comprador tenga más opciones.
Tanto para nosotros como para las personas que nos compran, siempre es más barato recibir el producto en un punto de recogida, en la oficina de correos o en un buzón destinado a la paquetería.
Muchas personas escogerán esta opción más barata si pueden, y además en algunas ocasiones será la preferida, pues no hay que estar en la vivienda en el momento en el que el repartidor llama a la puerta.
El tamaño de las cajas importa
Todo el mundo ha efectuado compras de tiendas virtuales cuyo contenido viene en cajas enormes que estaban rellenas de papel o de cualquier otro material de embalar.
Se trata de un error, ya que las empresas de transporte no solo cobran por peso, sino que lo hacen también por el tamaño de las cajas, así que siempre hay que ajustar la caja de embalaje a las dimensiones del producto.
A veces no se puede, pues no nos quedan cajas de ese tamaño o porque enviamos algo frágil que debe ser protegido, pero si procuramos que los envoltorios sean lo más ajustados posible, reduciremos mucho nuestras facturas de envíos.
Hay que negociar las tarifas
Es muy común que cuando comenzamos con el negocio de venta a través de internet paguemos las tarifas que anuncian las compañías de paquetería, pero eso puede cambiar con el tiempo.
Si vemos que nuestra cantidad de envíos crece, es hora de negociar con las distintas empresas, las cuales nos darán precios personalizados dependiendo del volumen de trabajo que les demos.
Así, nos podemos quedar con la más económica, o bien con aquella que nos ofrezca una mejor relación calidad-precio en los envíos.